Pan griego de aceitunas negras

Del libro 365 recetas de pan de Anne Sheasby.

La verdad es que después del "duelo" con Maragda se me ha ido el miedo a hacer pan, como los dos que hasta ahora he hecho han quedado tan buenos ya doy por echo que soy una artista, aunque la verdad es que el otro día tuve que tirar uno (bueno dos) a la basura, pero esos no cuentan que me deprimo.

Este lo hice añadiéndole alguna cosa que la receta original no tenía, cuando lo saqué del horno me comí un trozo (el que falta) y estaba buenísimo, pero el pan tenía que pasar la prueba del "enfriamiento", cualquier pan calentito está bueno, pero la cosa cambia cuando se enfrían ahí está la verdad, si frío está bueno uhmm entonces has ganado.

Ingredientes:

200 gr aceitunas negras

500 gr harina fuerza blanca y un poco más para espolvorear

1 cucharadita de sal (le faltaba un poco más)

2 cucharaditas de levadura seca

5 cucharadas de aceite de oliva virgen extra

unos 250 ml de agua templada

(yo le añadí mostaza seca en granos y unas hierbas provenzales)

Unte de mantequilla o espolvoree de harina una placa de horno. Deshuesar y picar la carne de las aceitunas. Resérvelas. Tamice la harina y la sal en un cuenco grande y mezcle con la levadura. Practique un hueco en el centro, agregue la mitad de las aceitunas picadas, el aceite y la cantidad de agua suficiente para que, sin dejar de amasar, obtenga una textura blanda.

Coloque la masa sobre la superficie de trabajo ligeramente enharinada y amase hasta que adquiera una masa elástica y homogénea. Haga una bola, colóquela en un cuenco ligeramente untado con aceite, tape y deje levar en un lugar caliente hasta que haya doblado su tamaño.

Aplaste la masa sobre la superficie de trabajo espolvoreada de harina y extiéndala con el rodillo hasta darle una forma rectangular de unos 35 por 25 cm. Espolvoree regularmente la superficie de la masa con el resto de las aceitunas y enróllela de forma apretada, como si se tratara de un brazo de gitano, empezando por un extremo corto. Pince los extremos finales para sellar el relleno.

Coloque el pan con la juntura hacia abajo, sobre la placa de hornear. Con un cuchillo afilado, corte una entalla longitudinal en el centro del pan, si lo desea. Tape y deje levar de nuevo una hora o hasta que haya doblado su tamaño.

Mientras, caliente el horno a 220º. Espolvoree el pan con un poco de harina tamizada. Hornéelo 10 minutos, reduzca la temperatura a 190º y hornee otros 20-25 minutos o hasta que el pan esté dorado o al golpear su base suene hueca. Colóquelo en una rejilla. Sírvalo caliente o frío cortado en rebanadas.

Se me olvidaba, en realidad yo lo puse todo en la thermomix y en un ratito salió la masa.